LA IMPORTANCIA DE LA MEDITACIÓN.
Aprender a meditar, a reunir y estabilizar tus energías, marcará en tu vida, una gran diferencia. Te permitirá estar presente por completo, alerta, relajado y receptivo. Es indispensable para establecer una comunicación permanente con tu Ángel.
Es un proceso por medio del cual, retiramos nuestra atención del mundo exterior y la concentramos con el alma o mundo interior. La meditación es esencial para el trabajo espiritual, es lograr el estado de plena conciencia que nos conecta con el infinito; un momento íntimo de reflexión.
Significa centrar la atención en el cuerpo y estar presente en el momento, un acto de reunir todas tus energías: espirituales, físicas, mentales y emocionales; poner los pensamientos y emociones en un equilibrio sereno y armonioso dentro del cuerpo. Allí resulta más fácil centrar selectivamente tu atención para visualizar u oír la voz de tu Ángel.
El lugar de meditación debe ser tranquilo, silencioso y cómodo para ti, preferiblemente al acostarnos, donde nada ni nadie llame nuestra atención. El encender una vela, quemar una varita de incienso, colocar una flor fresca o una copa de agua; te ayudan a calmar la mente.
EL PERDÓN.
El perdón es una experiencia de amor que se basa en la aceptación; significa que estás dispuesto a dejar de sentir resentimientos u odios, hacia las personas que te han ofendido. La falta de perdón inhibe tu progreso personal, porque te mantiene estancado, te ata a la persona que no has perdonado.
Para poder perdonar a otro, es indispensable primero perdonarnos a nosotros mismos; es desprendernos de los resentimientos u odios. Es liberarnos de preocupaciones, problemas y creencias negativas que nos dejan libres para ingresar a un estado de claridad, el perdón para nosotros y para otros. Allí descubrimos que nuestra vida marcha mejor, nos sentimos felices, menos tensos y en paz con nosotros mismos.
Practicar el perdón con nuestro Ángel, nos llena de alegría y paz; pues nuestro Ángel se comunica con los Ángeles de las personas involucradas, buscando soluciones al problema de una manera pacífica. La buena voluntad es tu ingrediente, deja que los Ángeles se ocupen del resto.
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